Los trabajadores en huelga iniciaron una serie de medidas de presión ► Está previsto que el miércoles voten en secreto sobre la subida salarial.
Los funcionarios de la Administración de Justicia de Galicia han empezado este martes una serie de medidas de presión, entre ellas encierros en los juzgados, que desarrollarán hasta que la Xunta los llame para retomar las negociaciones rotas el lunes. Los trabajadores en huelga abandonaron el encierro en A Parda al filo de las 19.30 horas entre cánticos de protesta y en presencia de agentes de la Policía Nacional, aunque sin incidentes.
Tras el fin de las conversaciones, el Gobierno gallego manifestó que no volvería a llamar a los sindicatos tras la oferta final, pero el presidente del comité de huelga, Manuel Tejada (SPJ USO), anunció que la representación social esperará a que la Xunta «recapacite» y los llame «cuanto antes, mejor».
«Los tendremos que hacer meditar (…) tomaremos medidas de presión», añadió el portavoz sindical instantes después de asegurar que mientras no se alcance un acuerdo, continuará la huelga indefinida que arrancó el pasado 7 de febrero.
Durante las asambleas celebradas este martes los sindicatos plantearon a los trabajadores la posibilidad de encerrarse al menos en los juzgados de las siete grandes ciudades gallegas y en aquellos puntos donde hubiese respaldo suficiente, han informado a Efe fuentes de la representación social.
En torno al mediodía, los trabajadores acudieron a las diferentes sedes judiciales para mantener «asambleas permanentes» con el objetivo de quedarse encerrados.
PROBLEMAS EN A CORUÑA, OURENSE Y VIGO. Los jueces decanos de A Coruña, Ourense y Vigo reclamaron antes la presencia de la Policía Nacional, que acudió con el objetivo de desalojar las sedes judiciales, abandonadas por los propios funcionarios sin incidencias, relataron fuentes del TSXG.
Los trabajadores a los que se les impidió continuar el encierro manifestaron su indignación con lo ocurrido y anunciaron nuevas medidas de presión, que consensuarán.
En el resto de sedes judiciales, los encierros se prolongaron con la idea de que siguiesen hasta que la Xunta llame de nuevo a los sindicatos para que negocien.
En concreto, en Pontevedra los trabajadores explican que continuaron hasta las 19.30 horas sin incidencias hasta ue se produjo su desalojo. Su idea era pasar la noche y todo el tiempo necesario hasta que se produjese la citada convocatoria.
El miércoles, entre las 12 y las 17 horas, esta anunciado que habrá urnas en los juzgados de las siete ciudades gallegas para que los funcionarios voten si el comité de huelga se debe plantar en su petición actual de 190 euros mensuales de subida o puede negociar «lo mejor posible, sin que esos 190 euros sean postura mínima obligatoria».
Los funcionarios ya bajaron su petición desde 400 euros, mientras la Xunta aumentó la suya desde los 27, 35 y 50 euros -según los cuerpos- hasta los 105, 108,42 y 133,42 actuales, con subida gradual entre este año y 2020.
